Vida Comunitaria
Importancia
Seamos sinceros, tanto si se trata de la propia familia como si no, vivir con gente es difícil. Vivir en una comunidad donde las personalidades y los orígenes son tan diversos como los colores de una caja de lápices de colores puede ser aún más difícil. San Juan Berchmans dijo una vez que la vida en comunidad era su mayor penitencia («Mea maxima poenitentia vita communis».) La vida en comunidad puede ser difícil, pero también es uno de los mayores apoyos de los religiosos. Un hombre junto a otro crece en valor y fuerza; su miedo desaparece, y escapa de cualquier trampa. Así, la belleza y la riqueza de la vida fraterna en común son mucho mayores que las dificultades que entraña. Como dice el Salmo (133, 1): «¡Qué bueno y qué agradable es que los hermanos vivan unidos!».
La unidad es el secreto de la vida comunitaria; no la unidad física, sino la unidad en Cristo. A través de la comunión fraterna enraizada y basada en la caridad, los miembros se convierten en ejemplos de reconciliación universal en Cristo.
Esencia
En nuestras comunidades tratamos de vivir la esencia del Reino que Jesucristo vino a inaugurar aquí en la tierra:
El reino de Dios es... justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.
(Rom 14:17).
Nuestras comunidades serán auténticas sólo si cada miembro se esfuerza por alcanzar la santidad, es decir, sólo si cada uno vive en docilidad al Espíritu Santo. Viviendo bajo esta docilidad, como fue evidente en la vida de nuestra Santísima Madre, nuestras comunidades se convertirán en comunidades de auténtica justicia, paz y alegría. Sin embargo, cuando la santidad no existe, no hay ley ni superior que pueda impedir la desintegración. Como decía San Pío X: «Donde falta la santidad, allí se abre paso inevitablemente la corrupción» (Haerent Animo, 5).
Justicia
La justicia debe ser lo primero que nuestras comunidades se esfuercen por vivir, porque una vida en común de muchos individuos debe ser ordenada. La justicia, pues, es el fundamento de la verdadera vida en común, porque da a cada uno lo que le corresponde: latría a Dios, veneración y obediencia a los superiores, respeto a los iguales, servicio a los inferiores y a todos, en su medida, caridad. «La justicia ordena todas las cosas humanas, desde las más pequeñas hasta las más grandes, según la voluntad y la ley de Dios, para que el hombre no sea deformado por el pecado, sino modelado a imagen de Dios» (San Juan Pablo II).
Peace
Eventos
Parte de la vida comunitaria incluye diversos eventos culturales, como los «Conviviums» regulares, presentaciones mensuales y los Juegos Florales, donde los seminaristas tienen la oportunidad de realizar presentaciones artísticas.